Explorando el Sitio
Cuando la familia llegó al almacén, se encontraron con una estructura claramente abandonada hacía mucho tiempo. Las paredes cubiertas de grafitis y las vigas de madera podridas mostraban décadas de deterioro. Montones de materiales desechados y metal retorcido estaban esparcidos por todas partes. Nyx, normalmente tranquilo, comenzó a olfatear el aire intensamente, su cuerpo en estado de alerta. “Definitivamente está sintiendo algo”, susurró Grace, observándolo de cerca.
El Sr. Johnson encontró una etiqueta descolorida medio enterrada bajo los escombros. “Parece que este lugar no ha sido tocado en años”, dijo. Alex pateó otro montón, revelando un cuenco para perros viejo y oxidado. “¿No creerán…?”, dejó la frase en el aire, con los ojos muy abiertos. La luz del sol se filtraba por las ventanas rotas, proyectando sombras espeluznantes. El almacén no solo parecía abandonado, sino que se sentía como si estuviera escondiendo algo.
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